Dolores del crecimiento infantil

Afecta a un 40 % de la población infantil”

Los dolores del niño en crecimiento es uno de los motivos más frecuentes de consulta en el pediatra o traumatólogo infantil. El dolor aparece:

  • De forma espontánea
  • Sin asociarse a ningún golpe
  • No relacionados con ninguna patología concreta.

 

Es importante siempre consultar con nuestro pediatra de referencia para hacer un diagnóstico diferencial y confirmar que se trata de “dolores de crecimiento”.

¿Por qué se producen?

En contra de lo que indica su nombre, no parecen estar producidos por el cierre del cartílago de crecimiento ni su presencia o intensidad están relacionadas con la velocidad de crecimiento del niño en ese momento.

Se deben al crecimiento de los huesos y de las partes blandas (tendones, músculos). Se cree que el hueso crece más rápido que las partes blandas, y es la tensión en éstas lo que produce el dolor cuando el niño está en reposo.

SÍNTOMAS:

  • Varían en intensidad y duración.
  • La edad de inicio es entre los 2 y 7 años.
  • Aparece con mayor frecuencia entre 25 y 40% por la noche.
  • Afecta con mayor frecuencia a las piernas pero también puede afectar a los brazos (menos frecuente)
  • Son de tipo intermitente, que aparecen y ceden. Suelen evolucionar en forma de brotes, puede ceder en días y aparecer meses después.
  • Suele despertar al niño.
  • Suele presentar mayor frecuencia los días que han hecho más ejercicio o han caminado más.
  • Normalmente desaparecen de manera espontánea y rápida.

¿Que podéis hacer como padreS?

  1. Realizar una consulta y valoración con el pediatra de referencia que lo confirme.
  2. Una vez confirmado, consultar con un fisioterapeuta infantil para iniciar la valoración y se pueda proponer las opciones que existen para ayudar a aliviar el dolor.
  3. Los dolores del crecimiento sí duelen y su hijo se beneficiará de su consuelo, caricias y atención.

¿Qué hacemos los fisioterapeutas infantiles?

  • Conocer sus características y distinguir el dolor normal del crecimiento de cualquier otra patología será lo más importante al abordar a un niño en crecimiento con dolor.
  • Valoración músculo-esquelética, tanto estática como dinámica. Existen diferentes alteraciones músculo-esqueléticas como pueden ser el: valgo de pies, valgo de rodillas, hiperlaxitud articular o de los ligamentos, dismetrías … que puedan estar aumentando estos dolores.
  • Valoración de los reflejos primitivos, con el objetivo de ver si hay alguno No Integrado que le pueda estar presentado alguna alteración.
  • Ejercicio como baile, gimnasia y aquellas que requieren practicar la flexibilidad.
  • Orientación y pautas a los padres para que puedan trabajar en casa.
  • En caso de que fuera necesario, derivación a otros especialistas: optometrista, podólogo, traumatólogo infantil….

¿Dónde suele localizarse el dolor?

La articulación que más frecuentemente refieren con dolor son las extremidades, porque es en ellas donde se encuentran los huesos más largos, que son los que tienen un mayor crecimiento. El dolor puede ser de una rodilla una noche y a los días puede ser que el dolor resida en la otra rodilla, por lo que son dolores cambiantes (muslo, rodilla, tobillo derechos e izquierdos).

¿Cuándo nos debe preocupar un dolor en el niño en crecimiento?

Habrá que buscar atención médica cuando:

  • El niño tenga dolor articular y fiebre.
  • El niño estéirritable por el dolor.
  • El dolor sea continuoy no ceda con analgésicos.
  • El dolor sea siempre en la misma localización y durante el día y la noche.
  • Haya una cojeraevidente durante varios días sin mejoría.

¿El dolor puede deberse a otro problema?

En efecto, el dolor puede no ser un dolor del crecimiento. En niños muy activos, el dolor puede localizarse en zonas como la cara anterior de la rodilla o la región posterior del talón. Estas localizaciones son frecuentes en los niños y son debidas a las enfermedades de Osgood-Schlatter y de Sever, respectivamente. Para ello, bastará con una buena exploración por el traumatólogo infantil para dar el diagnóstico, sin necesidad habitualmente de recurrir a otras pruebas.

 

ENFERMEDAD DE SEVER (DOLOR EN EL TALÓN EN NIÑOS)

El dolor es localizado en el talón. En los niños que lo sufren, la causa más común es una alteración de la superficie de crecimiento en la parte posterior del hueso del talón (calcáneo), donde el tendón de Aquiles se une a el.

Esto se conoce como la enfermedad de Sever o apofisitis calcánea (inflamación del cartílago de crecimiento).

Suele aparecer entre los 10 a 14 años de edad. Se trata de uno de los varios tipos de «Osteocondrosis» que pueden ocurrir en otras partes del cuerpo, como en la rodilla (enfermedad de Osgood-Schlatter).

¿CUÁLES SON LOS SÍNTOMAS?

  • Dolor generalmente en la parte posterior y lateral del hueso del talón.
  • Generalmente se alivia el dolor cuando el niño no está activo y aparece con el deporte.
  • En la exploración, la palpación a los lados del hueso del talón es a menudo dolorosa.
  • La afectación puede ser unilateral o bilateral
  • Actividades como correr y saltar empeoran los síntomas. En casos más graves, el niño puede incluso cojear.
  • Mayor tensión en los gemelos por la gran tracción del Tendón de Aquiles.
  • Un pie en pronación también es muy común ya que esto puede causar una carga de peso desigual en la parte posterior del calcáneo.

¿Qué causa el dolor de talón en niños?

La causa de la enfermedad de Sever no es del todo clara. Se debe probablemente:

  • Uso excesivo o traumatismos menores repetidos, debido sobre todo a actividades deportivas.
  • El exceso de peso tiene mayor riesgo de desarrollar apofisitis calcáneo.

Enfermedad de Osgood-Schlatter

Se caracteriza por dolor debajo de la rodilla en la parte anterior. Es una de las causas más frecuentes de dolor de rodilla en el niño, especialmente entre los 10 y los 15 años. La incidencia es mayor en niños, aunque está aumentando en niñas.

Esta enfermedad se produce por una sobrecarga mecánica en una zona de crecimiento de la tibia. Las áreas donde crecen los huesos, llamadas platillos de crecimiento, son relativamente débiles y pueden lesionarse con relativa facilidad. El tendón rotuliano, que se encuentra justo por debajo de la rótula, se inserta en el cartílago de crecimiento de la tibia y tira fuertemente de él para estirar la rodilla. Ello puede provocar sobrecarga repetida en esta zona, alteración de los tejidos, insuficiencia en la vascularización, trastorno de la osificación y fenómeno inflamatorio en un intento de reparación.

 

¿Qué SÍNTOMAS PRESENTA?

  • Aparece al realizar actividades físicas (caminar, correr
  • Inflamación local y dolor importante al tocar esa zona.
  • Aparece en niños activos o que practican deportes intensos que requieren chutar (fútbol), realizar muchos saltos (baloncesto), arrodillarse o agacharse.
  • Empeora al subir escaleras, ponerse de cuclillas, correr o saltar.

A la izquierda, prominencia debajo de la rodilla por la inflamación localizada. En la radiografía, zona de crecimiento de la tibia irregular por enfermedad de Osggod Schlatter.

 

¿Cómo PODEMOS AYUDAR?

  • La finalidad del tratamiento es eliminar el dolor, mientras se intenta mantener, tanto como sea posible, la actividad. Esto se puede conseguir normalmente a través de una combinación de estiramientos, hielo local y medicación antiinflamatoria.
  • Los ejercicios de estiramiento se deben realizar antes de hacer deporte. Los ejercicios se enfocan en los músculos anteriores y posteriores del muslo, llamados cuadríceps e isquiotibiales. Después de la actividad física se coloca hielo. La medicación antiinflamatoria puede ayudarnos a controlar el dolor.
  • Sino disminuye el dolor, se debe disminuir sus actividades deportivas.
  • Técnicas osteopáticas, como por ejemplo manipulaciones del peroné y de todo el complejo articular adyacente (pelvis, cadera y tobillo-pie), todo ello orientado a mejorar la biomecánica natural del cuerpo en su globalidad.
  • En cuanto al trabajo activo, una vez pasado la primera etapa destinada a la disminución de la sintomatología, se orientará a aportar de flexibilidad la zona muscular de la parte posterior del muslo y al aparato extensor de la rodilla, junto con el psoas; que harán que la tensión ejercida sobre el tendón rotuliano sea normalizada de nuevo. Realizar un trabajo de balance muscular en ambas piernas, trabajo de propiocepción y de potenciación progresiva para una correcta readaptación a la actividad física, en el caso de deportistas.

En la Clínica Silvia Molins estamos especializados en pediatría y la evolución de vuestro hijo.  Por supuesto que en casos donde estas patologías se encuentren presentes, la terapia infantil brinda poderosas soluciones y beneficios; no obstante, el emplear tratamientos fisioterapéuticos a temprana edad desvinculados a un problema por ser de nacimiento, garantiza en un futuro un óptimo desarrollo muscular y cognoscitivo.

Cuanto más se le aplique fisioterapia infantil más se le podrá ayudar a corregir o en tal caso a prevenir, las complicaciones que condicionan su desarrollo. Hay que tener en cuenta que mientras más pequeño sea el niño o la niña, mayor es su plasticidad cerebral y muscular.