Preparación al parto

La Osteopatía ayuda a la madre a optimizar los recursos fisiológicos de los que dispone para colaborar con la preparación de un parto más “fluido”

La Osteopatía en el preparto y embarazo no es algo nuevo, en otros países se practica con excelentes resultados desde hace años, y en el nuestro está empezando a implantarse. Sin embargo mucha gente desconoce todo su potencial.

La realización de la episiotomía, o sea el corte que se hace en el periné para agrandar el orificio vaginal y evitar desgarros en el momento del parto, no es una decisión que dependa 100 por ciento de las parturientas.

Es una determinación que toma el médico in situ y depende de un montón de factores que no se podrán saber hasta ese momento. La elasticidad de tu periné, el tamaño de la cabeza del bebé, el tipo de tejidos… son varias las circunstancias que se tienen en cuenta para realizarla o no. Sin embargo, hay algunas cosas que sí podemos hacer durante el embarazo para favorecer a que el periné se prepare mejor para el momento de dar a luz y reducir las probabilidades de necesitar el procedimiento.

En la preparación para el parto los beneficios de la osteopatía son máximos.

En el proceso del parto es necesario que el sacro, coxis, iliacos y vértebras lumbares de la madre cumplan una perfecta movilidad y que los músculos y ligamentos de la pelvis estén flexibles y relajados.

El estado emocional de la madre durante el parto es igualmente importante, ya que un parto vivido como una situación de angustia y estrés dificulta el proceso y lo desnaturaliza.

En cada trimestre del embarazo, el cuerpo de la mujer deberá adaptarse a unos cambios osteoarticulares y hormonales. La pelvis y columna vertebral  debe ajustarse al volumen creciente del útero. Pueden aparecer síntomas porque hay una modificación del centro de gravedad, y el tejido conjuntivo y osteoarticular (huesos, tendones, ligamentos y músculos) se resiste a este movimiento de transformación que vive la mujer embarazada, en diferentes etapas del embarazo pueden aparecer ciertos síntomas:

• Dolor inguinal por Disfunción de Sínfisis Púbica
• Ardores de estómago
• Dificultades respiratorias
• Piernas hinchadas y venas varicosas
• Náuseas,  reflujo gastroesofágico, vómitos
• Vértigo y dolores de cabeza
• Dolor en costillas y columna vertebral
• Estreñimiento y hemorroides
• Lumbalgia y Ciática de la mujer embarazada
• Trastornos circulatorios en las piernas

¿Qué tratamiento se puede realizar?

Cuando la mujer prevé quedar embarazada, puede ser útil consultar a un osteópata a fin de preparar su cuerpo para acoger a una nueva vida y para prevenir los pequeños trastornos que a veces surgen a lo largo de este período.

Tratamiento Previo al Embarazo:

• Tratamiento de la esfera ginecológica para detectar y eliminar adherencias, falta de movilidad y disfunciones del útero.
• Alineación pélvica que disminuye la tensión de los ligamentos del sacro.
• Optimizan el funcionamiento normal de la glándula pituitaria, responsable de la correcta liberación hormonal necesaria para todos los procesos del embarazo, como pueden ser: preparación del útero para la implantación, cambios de humor, etc.
• Mejora del retorno venoso y linfático para la prevención de edemas, varices, piernas cansadas, etc.

Tanto si la sesión osteopática se centra en el cráneo, el abdomen o el marco óseo, las técnicas utilizadas siempre se adaptan a la mujer embarazada y al bebé; los movimientos siempre son suaves.

• 1 º trimestre:

• Manejo de la ansiedad, el estrés y eliminación de las hormonas producidas que pueden llevar a padecer estreñimiento, picores…
• Tratamiento de la pelvis.
• Cambio del centro de gravedad en el 2º trimestre
• Tratar  el nervio vago y el diafragma para reducir los síntomas de nauseas matinales.

• 2º Trimestre:

• Tratamiento de la congestión venolinfática: edemas, piernas cansadas, calambres, etc.
• Dolor dorsal y de costillas, que en ocasiones impide conciliar el sueño e incluso respirar con profundidad.
• Estiramiento de los ligamentos uterinos.
• Flexibilización del suelo pélvico.
• Infecciones urinarias.
• Prevención de anemia ferropénica a través de la alimentación.
• Prevención y co-ayudante en el tratamiento del riesgo del parto prematuro y contracciones previas.

• 3º Trimestre:

Incluso si estás teniendo un buen embarazo, un Chequeo para el Tercer Trimestre puede ofrecerte beneficios, asegurando que todo está en orden para los cambios que van a tener lugar y para lo que se le exigirá a tu cuerpo durante el parto.

• Disminución de la tensión lumbar, púbica, uterina y pélvica.
• Disminución de síntomas como ciática, dolor púbico, calambres en las piernas y edema.
• Maximizar la movilidad pélvica y sacra para el mejor desarrollo del parto.
• Prevención y co-ayudante en el tratamiento del riesgo de parto prematuro y contracciones previas.
• El trabajo en la pelvis y la pelvis ligamentosa tiene como objetivo favorecer un parto natural.

• Chequeo Post-Natal:
  • El objetivo del tratamiento en ese momento es aliviar a los músculos, ayudarles a recuperar su tono, reequilibrar la pelvis y el sistema de fascias y membranas del sistema nervioso que casi siempre quedan afectados tras un parto.
  • Eliminar el dolor cervical y de espalda debido a la lactancia y a llevar el bebé en brazos.
  • Tratamiento de las cicatrices: episiotomía, desgarros,  cesárea, cesárea vaginal …..para la prevención de las adherencias.
  • En las semanas que siguen al parto, la madre puede sufrir ciertas molestias: problemas urinarios, malas posturas, dolor de espalda, perineo relajado. La osteopatía puede ayudar a curar estos síntomas. Además, se aconseja visitar al osteópata un tiempo después del nacimiento para asegurarse de que el cuerpo ha recuperado su equilibrio.

En la Clínica Silvia Molins, estamos especializados en Fisioterapia y Osteopatía Obstétrica que abarca el embarazo, parto y postparto, formando una parte muy activa dentro del mundo de la ginecología y obstetricia.

Es importante el seguimiento osteopático para  la armonización del cuerpo. Actuar sobre son los diferentes sistemas del cuerpo humano: visceral, respiratorio, articular, circulatorio y craneal. Con el fin de permitir que la persona mantenga o recupere un estado de bienestar físico, mental y afectivo.

El trabajo del Suelo Pélvico es muy importante ya que mejora la circulación, la capacidad respiratoria y fortalece la elasticidad de la musculatura del Suelo Pélvico. Los ejercicios se deben realizar con regularidad y así podrás conseguir tonificar los músculos que intervienen en el parto, y podrás tener una mejora recuperación y menos complicaciones.

En pre-parto:

• Buena alineación del las líneas de gravedad
• Liberación de la pelvis, a través de movilizaciones activas o asistidas por el fisioterapeuta.
• Aliviar los dolores musculares que aparecen por los cambios, especialmente a nivel lumbar: los masajes, las movilizaciones suaves y el calor local nos resultarán de gran ayuda.
• Buena dinámica respiratoria (buena función diafragmática). El diafragma es el  eje de las cadenas musculares relacionada con el periné, la pelvis y el sacro y su capacidad elástica.
• Hipopresivos
• Prevenir el estreñimiento y las hemorroides.
• Enseñaremos el Masaje Perineal: es un masaje para aumentar la elasticidad y mejorar la circulación y, por tanto, la oxigenación de la musculatura del periné. El masaje perineal durante la gestación reduce las probabilidades de sufrir episiotomías y desgarros durante el parto
• Ejercicios de Suelo Pélvico: Ejercicios de Kegel para la tonificación, elastificación y relajación del suelo pélvico

En post parto:

• Drenaje linfático manual para desincharlas piernas tras el parto
• Continuaremos con ejercicios del suelo pélvico, para la recuperación y evitar incontinencias urinarias de esfuerzo.
• Ejercicio físico global, con especial atención a la movilidad de la columna lumbar.
• Tonificación abdominal progresiva, trabajándola de manera sincronizada con el suelo pélvico. Empezaremos con ejercicios hipopresivos.
• Masoterapia, osteopatía y estiramientos para tratar tensiones y algias vertebrales, o problemas de sacro o coxis, frecuentes también después del parto.

El trabajo del suelo pélvico durante el embarazo nos ayudará a:

• Prevenir la incontinencia urinaria que se produce por el peso del bebe sobre tu vejiga.
• Tener un parto más fácil al poseer un mayor control sobre nuestro cuerpo, evitando desgarros e incluso evitar la episiotomía, disminuyendo el dolor después del parto.
• Aumento de la circulación sanguínea en la zona rectal, facilitando la cura de la episiotomía en caso de producirse y disminuir las hemorroides.
• Prevenir prolapsos.
• Volver a las actividades de la vida diaria sin problemas de incontinencia.
• Ayudar a la vuelta a la vida sexual normal después del parto.

La Osteopatía Obstétrica usa técnicas suaves y delicadas que son perfectamente seguras para todos los estadios del embarazo, tanto para la madre como para el bebé.

También es importante tratar a los bebes después del parto con el fin de revisar el cráneo por posibles alteraciones tras el parto que puedan provocar solapamientos y cierre de agujeros por donde pasan los nervios que inervaran la esfera gastrointestinal, provocando cólicos, regurgitaciones. Y otras  como alteraciones del sueño, obstrucciones del conducto lacrimal…